Déleg: La fiesta en honor a la Virgen de El Cisne cuenta con su propia imagen tallada en madera
Profesar la fe a la santísima Virgen de El Cisne y rendirle homenaje con una memorable fiesta es toda una tradición en la ciudad de Déleg de la provincia del Cañar y este año la celebración subió de nivel al contar con la sagrada imagen de la Virgen tallada en madera de nogal, de 1, 20 metros de altura.
Carlos Dután Mizhquiri nieto del iniciador de esta fiesta, es el
responsable de hacer realidad el anhelo de su padre que hoy lo mira desde el
cielo.
Todo empezó en Jerusalén, un pequeño recinto de Déleg hace ya más de 50
años, allí los abuelos de Carlos, Don Luis Ángel Dután y su esposa Doña María
Alegría Tito; personajes de corazón noble y devotos de la Virgen María, desde
muy jóvenes aprendieron la importancia de la fe y la devoción a la madre de
Dios y con el tiempo y el milagro recibido la convirtieron en una hermosa tradición
familiar.
Según cuenta Carlos, su tía Herlinda padecía una enfermedad y para pedir su
sanción ella y sus padres fueron a la parroquia El Cisne en la provincia de
Loja, del lugar su tía trajo un cuadro con la imagen de la virgencita, en su
casa le hicieron una urna y allí la colocaron, sus abuelos y familiares
contaron que las oraciones llegaron a Dios a través de la Virgen y que la
enfermedad de la tía Herlinda desapareció. Allí empezó la fiesta misma que a más
de medio siglo de su primera celebración continúa intacta hasta nuestros días.
Desde sus inicios la fiesta ha sido grande, incluyendo
las vísperas, la misa, la celebración de juegos tradicionales como son las
ollas encantadas, carrera de cintas, concurso de acordeones, danzas, la
representación de la guerra entre Ecuador y Perú, la chirimía y mucho más. Con
el tiempo esta celebración pasó a ser coordinada y organizada por el hijo de don Luis y padre de Carlos el señor
Manuel Jesús Dután; él siguiendo la tradición de sus padres año tras año
cumplía a satisfacción la tarea encomendada, pero siempre quería ir más allá,
su sueño era elaborar en madera y de gran tamaño la imagen de su virgencita
milagrosa.
Mientras don Manuel organizaba la fiesta desde los Estados Unidos; lugar de
su residencia, su hijo Carlos continuaba su labor particular sin mostrar mayor
interés en lo que sus padres hacían, pues en principio sus prioridades eran
otras, por eso es que, hace no más de cinco años se involucró en la tarea que
venía realizando su papá apoyándolo de diferentes maneras; es así que aprovechando
la fiesta de la Cruz en la Plazuela incluye la organización de una competencia
atlética denominada 5k, ésta la realiza con la ayuda de su amigo en Déleg
Carlos Molina, una competencia deportiva que ha tenido muy buena acogida por
los amantes de este deporte y que cada año llena las expectativas de los
competidores y realza las festividades.
“Recuerdo que fue un 5 de enero que me desperté pensando en el sueño de mi
padre, él quería una imagen tallada de la virgencita y yo tenía que hacerlo
realidad “nos cuenta Carlos, allí empezó a organizar en su mente las ideas que
tenía y la forma en cómo llevarlas a cabo.
“Me llamó y me dijo Blanca; tengo unas ideas para la próxima fiesta, quiero mandar a tallar la imagen de la Virgen como quería papá y tú tienes que ayudarme” nos cuenta ahora doña Blanca Gavilánez, agregando que empezaron con unas ideas un tanto confusas pero que tenían mucha emoción, por ello sin dudarlo decidió apoyarlo. Primero empezaron buscando el lugar donde mandar hacer la imagen, Carlos recomendó al escultor Raúl Nazpud de la ciudad de Azogues, quien tiene su taller por el centro de la ciudad, hasta allí fue la señora Blanca preguntó los precios y detalles, se comunicó por video chat con Carlos, se acordó el precio e inmediatamente dio inicio al trabajo.
El hábil artesano azogueño, describió meticulosamente cada detalle y expresión que quería que la imagen de la Virgen tuviera. Fue un proceso largo y minucioso, pero el resultado final fue una obra maestra de la fe. En cuanto a la vestimenta, Blanca Gavilánez menciona que fue otro “lio” pues Carlos cada vez salía con nuevas ideas y tenían que ir agregando diseños a los ya seleccionados y es que según relata el mismo Carlos, esta fue una tarea que no le dejaba dormir, cada vez que entraba a su facebook se le aparecía publicaciones religiosas, con ideas brillantes, entonces inmediatamente llamaba a su aliada en Déleg y le sugería los cambios.
La confección de los trajes se realizó en la parroquia Ricaurte de Cuenca, en un taller dedicado exclusivamente a la confección de ropa para la Virgen; aquí se cosió un traje color anaranjado y blanco que uso el 20 de septiembre cuando se trajo a la Virgen desde Azogues, ya no desde Ricaurte como se tenía pensado inicialmente; ese día, más de 100 personas la recibieron en Déleg, pese a no haberse hecho ninguna convocatoria, los fieles llegaron de manera espontánea. El otro traje, el de fiesta, es de fondo dorado, tiene un tul blanco, una capa, un largo velo sostenido por la corona de la santa y que por su dimensión puede ser cargado hasta por 100 caballeros, le acompaña también un velo pequeño, perlas y un gran rosario. La virgen lleva en su brazo a su hijo el niño Jesús.
Mientras nos describe la vestimenta, Carlos hace una pausa, para agradecer
a quienes le apoyaron con la Virgen y a quienes ayudaron en la organización de
la fiesta; empieza nombrando a la señora María Lidia Mizhquiri, su madrecita, a
quien considera su pilar y su guía, a su hermano mayor Luis Dután, quien aportó
para la elaboración de la obra, a la señora Emperatriz Chuqui, quien contribuyó
para el manto y el primer vestido, a su sobrino Alex Gavilánez, que donó corona
y cetro, su hermano Rosendo Dután donó para el cabello, a su amiga Blanca Gavilánez,
a Jahaira Alvarado a su hermano Manuel, al Sindico Manuel Tito y a sus
tías quienes apoyaron de diferentes
maneras en todo lo relacionado al antes, durante y después de la fiesta.
Carlos Dután cree que la Madre de Dios intercederá en sus creyentes y está seguro que pronto tendrá una respuesta favorable… Entonces si Usted amigo que está leyendo este artículo, puede apoyar, acérquese con confianza o llame a Carlos Dután y haga su contribución.
Don Carlos Dután y su familia reiteran su compromiso de continuar
realizando la fiesta en honor a la Santísima Virgen de El Cisne y a Jesús del
Gran Poder todos los años, la última semana del mes de septiembre, con la misma
energía que lo hacían su abuelo y padre, tratando siempre de mejorar los
eventos y entregándole a Déleg y al mundo entero una fiesta llena de cultura y
tradición, de amor y esperanza, que renueve la fe en los cristianos y que
además reactive la economía y el turismo del cantón.
No cabe duda que, con su belleza y serenidad, la imagen de la Virgen de El Cisne se convertirá en un símbolo de esperanza y consuelo para todos los que la visiten, la devoción por ella renovará en las personas su propia fe, porque en ella encontrarán consuelo en los momentos difíciles.
La historia que nos comparte Carlos es un ejemplo inspirador de cómo una
tradición familiar puede mantener viva la fe y fortalecer los lazos
comunitarios, en tanto que la imagen tallada de la Virgen es un testimonio
tangible de su amor y devoción que continuará siendo un faro de esperanza para
las generaciones venideras. (CQR)
Imágenes
https://photos.app.goo.gl/ZqDcv6fakxhYV29XA
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